El título original de la película, Flawless, le
va pintado. En inglés, flawless significa impecable/sin errores o sin defectos,
un término que describe a la perfección tanto al reparto como al director y al
guión. La película reúne a un verdadero "equipo de ensueño" cinematográfico.
Junta a dos de las estrellas más importantes del mundo, Demi Moore (Los ángeles
de Charlie:, Full Throttle, Indecent Proporsal, Ghost) y Michael Caine (Batman
Begins, The Quiet American, The Cider House Rules), con uno de los mejores
directores de nuestra época Michael Radford (The Merchant of Venice, Il Postino,
White Mischief, 1984) y los combina con un impresionante guión del escritor
debutante Edward Anderson. El resultado final es un sensacional thriller.
La película está producida por Michael Pierce y
Mark Williams de Pierce/Williams Entertainment (The Cooler, Chaos, U-Boat), con
producción ejecutiva de Stephen Margolis. Future Films Ltd (Mrs Henderson
Presents, Ladies in Lavender) ha coproducido el filme. Pierce subraya que el
guión de Anderson hace que la película sea muy especial. "Enseguida me
impresionó la absoluta originalidad del proyecto", dice el productor,
entusiasmado. "En este mundo, se leen cientos de guiones, pero éste me impactó
desde el primer momento. Cuando lees uno bueno, sabes en seguida que
funcionará". El otro factor singular de Un Plan Brillante es su
impecable reparto. Williams resalta que Michael Caine es una verdadera leyenda.
"Sigue gozando de tanta vigencia porque es muy bueno. La mayoría de las
estrellas de Hollywood no son capaces de pasar de ser actores principales a
actores de carácter… ya sea por su aspecto o por su ego o por su capacidad. En
Hollywood la gran pregunta es: ¿cómo consigues seguir en la industria? Michael
lo hace gracias a su encanto. "Sabe exactamente cómo funciona este mundo y no se
deja arrastrar por un ego que lo envuelve todo. Sólo acepta papeles que no puede
rechazar y así mantiene el listón muy alto. Le encanta seguir recibiendo ofertas
porque el hecho de que sigan llamando a su puerta es una muestra de respeto y
aprecio, pero siempre hay que mantener un control sobre la calidad. "Michael no
necesita el trabajo, pero le encanta la adrenalina que provoca estar en un
rodaje. Yo creo que seguirá trabajando toda su vida porque sigue teniendo ese
deseo ardiente y esa habilidad consumada. Es un ejemplo maravilloso de cómo
forjarse una carrera en Hollywood".