El cofundador y administrador delegado de Yahoo!, Jerry Yang, dejará la conducción del grupo informático apenas el consejo de administración haya designado a su sucesor, informó hoy el grupo a través de un comunicado.
Yang, de 40 años, permanecerá en el consejo de administración, agregó la nota. El presidente del CDA, Roy Bostock, examinará las candidaturas, tantos internas como externas.
En agosto Yang fue confirmado en su rol de dirigente de la asamblea de accionistas, pero en los últimos tiempos crecieron las críticas porque su estrategia incluyó el rechazo de las ofertas hechas por otro grande del sector, Microsoft.
Yang volverá a su antiguo rol de "director de estrategia y tecnología" de la sociedad.
El co-fundador de la empresa había dado vida a lo que luego se convirtiría en el coloso informático actual cuando tenía 26 años.
Su voluntad de conservar una total libertad de movimiento, se reveló finalmente una elección cargada de insidias que, unidas a problemas de otra naturaleza, minó la fuerza financiera de Yahoo!.
El valor de la acción, que había alcanzado su máximo en febrero superando los 30 dólares, cayó a 10,63 dólares en el cierre del lunes.
La noticia sobre la salida de escena de Yang, en las contrataciones post-clausura, hizo subir el valor a 11,10 dólares por acción.
Microsoft llegó a ofertar 31 dólares por acción y un total de 47.000 millones de dólares.
En mayo retiró su oferta.
"Este es el mejor momento para llevar a cabo la transición hacia un nuevo administrador delegado que permita al grupo retomar la marcha", se lee en el comunicado del consejo de la empresa.
Se abre la puerta para un acuerdo con Microsoft
"Creo que la marcha de Yang es un progreso, un reconocimiento de que Yahoo necesita un nuevo planteamiento agresivo para situarse correctamente y aprovechar las aún crecientes oportunidades en publicidad online", escribió Shar Van Boskirk, analista de Forrester Research, en su blog.
Aunque Steve Ballmer, consejero delegado de Microsoft, dijo recientemente que su grupo ya no está interesado en Yahoo, los expertos creen que es más que probable que la compañía vuelva a lanzar en breve otra oferta que los accionistas recibirían con los brazos abiertos.
Para Microsoft, el desarrollo de sus servicios y productos Internet sigue siendo prioritario -es número tres en búsquedas por detrás de Google y Yahoo- argumentan y, además, una adquisición ahora le saldría mucho más barata que hace diez meses.
La salida de Yang supone el fin de una etapa en la historia de Yahoo, una firma que en su momento fue una pionera de Internet pero que no supo adaptarse a las nuevas tendencias ni competir frente a Google.
Durante la crisis de las "puntocom" a finales de los 90, Jerry Yang y David Filo reclutaron a Terry Semel, un experto ejecutivo de Hollywood, para dirigir la compañía.
La estrategia resultó ser acertada y Semel logró convertir a Yahoo en un portal de entrada para contenidos mediáticos en Internet. Usuarios y accionistas estaban satisfechos y las acciones de la empresa volvieron a subir.
No obstante, ni Semel ni los fundadores se percataron de que las nuevas tendencias que aparecían en la red.
En tan sólo unos años, una empresa llamada Google -cuyos fundadores estudiaron en Stanford con Yang y Filo- logró convertirse en el gigante de Internet con un diseño espartano en sus páginas y anuncios frente a los llamativos reclamos publicitarios mostrados por Yahoo.
Yahoo no valoró a tiempo el potencial del negocio de búsquedas en Internet ni la estrategia publicitaria de Google, cuyos enlaces patrocinados son mucho más eficientes que los clásicos "banners" de la red.
Cuando Semel abandonó la firma en junio de 2007, Yang decidió asumir el cargo de CEO, lo que en opinión de muchos accionistas y expertos del sector fue un error.
Yang, un personaje querido en Silicon Valley de carácter amable y tranquilo, nunca estuvo a la altura del cargo que asumió y, como en el caso de la oferta de Microsoft, su vínculo emocional con la firma le llevó a tomar controvertidas decisiones.
El ejecutivo luchó en los últimos meses por sacar adelante una alianza publicitaria con Google que era su tabla de salvación, pero cuando esta estrategia también falló, en el sector se consideraba que la noticia de su dimisión no tardaría en llegar.
"Ha sido un año increíble", reconoció el propio Yang en una conferencia sobre tendencias en la red celebrada este mes en San Francisco. "Lo cierto es que lo mejor que podría hacer ahora Microsoft es volver a lanzar una oferta sobre Yahoo", confesó.