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+ 5, como si la numerología fuese unos de los caminos para el conocimiento de la dramaturgia de Briski. Su fecha de nacimiento fue un 2 de enero de 1938, anotado en el registro recién el 9, una semana después, su madre Clara llevaba al pequeño Naum en brazos.
El menor de 3 hermanos, Mario el mayor, jugador de básquet e ingeniero y poseedor de la colección completa de El Grafico. Perla, ama de casa, con sus estudios universitarios de medicina incompletos por un casamiento que llegaba. Falta su padre Pipe, comunista exilado de la Bielorrusia de entre guerras, de quien Norman habla mucho en Mi política vida.
Y como la familia no lo ata, viene el + que es la incógnita. La dramaturgia de Briski, es una idea, como los números. Que representa una canica, o cinco de ellas. Su teatro, como las canicas son juego, y como los números son una idea acerca del mundo + que produce existencia. Briski es el gauchito gil del campo teatral. Desertor de guerras inútiles, profesa su impronta con la fe para que aún el más escéptico luche. Por eso los roles cuasi intelectuales, cuasi delincuentes, alienados, locos, son críticos de su propia aventura existencial.
Cada rol es el actor o actriz que se enfrenta a la existencia sin estrategia. Porque su + no es positivista, es una negación de lo que continúa enunciado para el conocimiento, pero relativizado como hecho estético. Y sus obras, Unificio, La medicina, 9.81, Al lector, + La conducta de los pájaros, escrita con Vicente Muleiro, son apreciaciones posibles de la conducta humana. Su movimiento interno es planetario, con la ética de la responsabilidad afectiva para con sus ideas. Y el universo para abrazar la humildad. Para hacer lo que es. O ser lo que hace.
Su teatro no es sin actores ni actrices, no es una idea representacional, sino una pulsión que tiene olor, que tiene mirada. Por eso, su 5 no es sin canicas, su + no es sin el Gauchito Gil.
Y retomando la numerología, Norman tiene cinco hijos Gastón, Olinda, Catalina, Sibelina y Galatea. + Victoria Eva.
+ 5 es a sus 84 años seguir jugando a contar la vida. La metáfora de la numerología se vuelve infinita. Norman infinito.
La advertencia es tal vez la clara intención de Unificio. En la creencia de que las ciudades van a aumentar su densidad, la altura. Serán los territorios verticales donde agruparán a sus habitantes. Con las nuevas circunstancias, que ya aparecen en la convivencia, con las tecnologías que sostienen la solución.
Al centralizar los servicios en una agencia tal que permitiría la… del consumo y las antropológicas lógicas de las invenciones que modifican velocidades, tiempos y otras variables de la hiper comunicación. Sus habitantes entonces saben que todas las contingencias desarrollan dentro del Unificio inclusive un estadio, donde se desarrollan las guerras entre bandos de sectores contra sectores, de la ingrávida solución.
Hoy los sistemas políticos se siguen inscribiendo en el llamado "capitalismo" en todos sus modos con pocas excepciones que no llegan ni llegaron a instalarse como nuevos dogmas. El fracaso de la Revolución rusa, china, francesa, reafirman a las democracias como dominantes del social histórico y por consecuencia la permanencia del Imperio y sus extensiones sobre otros países dependientes a través del dominio económico militar. La conducta de los pájaros intenta traer dos pensadores de un pasado reciente, que podrían hoy hacernos revisar los caminos posibles para emanciparnos de este capitalismo cuya política nos aleja de aquellos pensadores tan combativos que nos permitiría retomar sus principios, que no parecen agotados en sus propuestas.
Ellos son Manuel Ugarte y Rosa Luxemburgo que estuvieron juntos en dos internacionales socialistas, donde claro está, que ellos siendo socialistas la perspectiva de sus estrategias no eran iguales y muchas de las condiciones sociológicas han cambiado. El tercer rol, Lítero es quien los trae a través de su impotencia de no saber que poder hacer con las nuevas incógnitas que la realidad, les muestra con conciencia que el capitalismo con sus democracias, estados, gobiernos, clases políticas (partidos) y, creyendo en su decadencia permitiría una discontinuidad donde pensadores como Rosa y Manuel afrontarían con su extensa experiencia y su innegable ética, una oportunidad para una ética nueva.
Lítero se desilusiona de ellos en tanto que las condiciones anunciadas por Carlos Marx, Jean Paul Sartre, Foucault, Bakunin, Trotsky, Lenin y otros, no alcanzan para este social-histórico que padece de una complejidad que acaba con la linealidad de otros tiempos, la tecnología, la fuerza armamentista, el consumo, el desamor, la medicina, producen nuevas conductas y alienaciones que no permitirían la aplicación de alternativas emancipadoras. En este encierro de imposibilidades, aparece un "entre" solidario de los tres, que permite visualizar el hecho solidario como fundacional de la fuerza de la subjetividad, que se expandiera con el boca a boca, con la mirada, con la sensualidad olvidada por las ideas sectorizadas.
La intervención del sistema universitario en el escenario político, sea la Universidad pública o privada, tiene una reputación de "casa de altos estudios" pero se omite su influencia en el Estado y en el sistema productivo. He sabido que todo relevamiento de carácter informativo llega directa o indirectamente a las cúpulas jerarquizadas de algunos grupos internos de estas instituciones universitarias. Hasta la filosofía, se conoce, tiene influencia en el carácter ideológico de las tendencias gubernamentales que apoyan sus políticas en determinados pensadores, que están en la enseñanza cotidiana de esas teorías y que impulsan intereses determinados ¿Por su clase? ¿Por su formación académica? Y que terminan siendo los "escondidos" de las decisiones del poder real. El alumnado también aristocratiza su conocimiento como los próximos ceos del capital. "Reforzando" su función en otros países emblemáticos de esas teorías. (Una especie de poder divino como si fuesen la religión del conocimiento).
Al lector son los estudiantes avanzados que toman la Universidad como primer hogar de sus existencias que no solamente le auguran un futuro promisorio, sino también una invención de la "clase profesional" que les permitiría una ascensión en lo social.
Famosa complicidad de grupos de poder que son "decisiones" de los claustros. Amistades férreas para cualquier embestida en su contra.
Al lector es una imaginaria situación de cuatro de ellos en la azotea del edificio, como lugar privado de sus charlas y atalaya de la ciudad donde se enfrentan a su fenómeno aparentemente insurreccional (humos en los cuatro puntos cardinales), que los invitan a las reflexiones distorsionadas de los hechos y produce en sus visiones clara confesión de la realidad que circunda su posición altiva. Viendo los peligros de los miedos a falsas racionalizaciones, deciden recurrir al "shelter de sobrevivencia" (refugio), para allí suponer que serán ellos los únicos sobrevivientes preparados para la nueva civilización.
¿Qué estamos viviendo en La medicina? La obra denuncia la mecanización de una medicina parcelada, sin mirada artesanal y perdiendo entonces la posibilidad de la salud para reemplazarla por la atención a la enfermedad.
Si nos atreviéramos a recurrir a la metáfora de este coágulo dramático podría incluirse en la conexión con el social histórico, que responde a que la salud y la enfermedad se conviertan en intereses homicidas.
La medicina Tomo I es el intento de patetizar (teatro) el encubrimiento de la salud como fenómeno de la enfermedad. Con un trato (tratamiento) protocolar que se aliena con la tecnología del diagnóstico, de la maquinaria como expendedoras de parcialidades y del juego ecográfico sobre los cuerpos humillados, detenidos, con determinaciones indudables. El enfermero es testigo de todas las escenas que concurren al negocio humanista de las obras sociales.
La estética de la obra está relacionada a la cinematografía, dado que la intensidad del teatro está en las vinculaciones, la intimidad y la presencia del actor en vivo. La cinematografía en cambio tendría la capacidad de la aproximación a la rostridad y de la cantidad de sucesos. Y esta obra se aproxima más a esta última estética, debido a que La medicina necesita el carácter cognitivo que no se instala en una sola escena.
Esta obra en términos de relato quiere diluir la trama para solo buscar las intensidades trágicas.
Pero como toda discontinuidad, lo institucionalizado imprevisiblemente es mordido por la rebeldía de los bordes y todo lo edilicio se derrumba y, los manteles pierden la luna.
Si definimos devenir como una negatividad productiva sería difícil decir que todas las inercias fuesen residuos de acontecimientos vitales. 9.81 trata con la escenificación de un mecánico ocupado por una empresa de reducir con los frenos la inercia de los vehículos. En su espacio experimental este operario obsesivamente, de forma empírica y dilucidando teorías (masa x velocidad / 9.81) reduce esta inercia hasta un punto tal que cree podría eliminarla, como también reflexiona que la inercia es parte de la conducta de los vínculos humanos. Inercia en el amor, la inercia en la política, en la diversidad de las inercias planetarias. Constituye la gravedad 9.81 la singularidad de la tierra que descubre la historicidad de este intento en un archivo del pasado, que el antecesor de estas pruebas había muerto en el intento, aquel que fuera traído desde el extranjero con la misma tarea. Nuestro operario descubre que la inercia es entonces indispensable (como el mar para las ballenas) porque todo stop eyecta y lo comprueba con el muñeco amigo estrellándose contra el paredón. Cree entonces que su empresa mata para vender y reivindica una mejora en su sueldo.
Hoy por hoy al teatro dormido se le clavó una espina de subsidios, snobismo, postmodernismo, celulitis y la glotonería del entretenimiento vil, si se despierta sin alas, sin recursos metodológicos frente a la realidad que busca el espanto como aquella estética del Goya. El mundo eligió la civilización de tecnológicas instituciones, el juego perverso del dedo mágico, hoy por hoy despierta y busca el residuo, canta sin pentagramas con voz de garganta con arena.
Estas obras tienen al monstruo que asoma belleza y buscan en el asesino respuestas de la ceguera. Un teatro de narices enormes, de estúpidos baños de colmena, que eligen el desierto antes de arrodillarse. Una lepra productiva de alimentos sin propiedades, antes de que las heridas ni supuren sangre. Aquella crueldad que fue asesinada despierta para la renguera de los apolíneos.
Este teatro es para las cabezas que ruedan. Se acabó el espectáculo porque los culos fraccionados están en la góndola que se hunde por el agua envenenada. Beckett abrió la puerta y el infierno se había apagado, esa es la tragedia, todo lo demás… utensilios de la nada.
FICHA
Título: +5
Autor: Norman Briski
Coautor: Vicente Muleiro (La conducta de los pájaros)
Prólogo: Oslvado Saídón
Música: Fito Páez
Textos biográficos: Eliana Wassermann
Medidas: 15,5 x 22,5 cm
Solapas: 12cm c/u
Páginas: 180
Tipo de papel o soporte: Papel book ecobio
Gramaje: 75
Tintas: 1+1
Insert 8 Págs.
Tipo de papel o soporte: Ilustración brillante
Gramaje: 90
Tintas: 4+4
ISBN: 9789878619590
Editorial Dapertutto
Lunes 18 de abril a las 18.30 hs en la sala Jorge Luis Borges de la Biblioteca Nacional Aguero 2504
Presentación del libro de Norman Briski con Vicente Muleiro, Osvaldo Saidón, Carlos Aznárez y Leonardo Cook.
La presentación estará acompañada por muestras de varias escenas de las obras incluídas en +5, interpretadas por: Laura Tarchini, Juan Carlos Washington Felice Astorga y Sergio Barattucci.
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