Un proyector de cine de 35mm fue inaugurado en el Espacio Incaa Km 1173, La Rioja, en la única sala cinematográfica con que cuenta esta provincia de 342.000 habitantes.
La coqueta sala de 130 localidades, también llamada Espacio 73 para funciones de teatro, música y danza, pertenece a la Secretaría de Cultura local, lindera de un señorial patio del siglo XIX donde se ofrecen espectáculos y proyecciones durante el verano.
"El objetivo de instalar salas de cine es llegar a las 80, que es el diez por ciento de las existentes en el país", señaló Liliana Mazure, presidenta del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales en charla con Télam.
El doble programa inaugural se integró con "Música en espera", de Hernán A. Goldfrid, y "La sangre brota", de Pablo Fendrik, seguidos por un público entusiasta que desafió la noche gélida de ayer, en una ciudad acostumbrada a las altas temperaturas.
Previamente, Mazure y Lucrecia Cardozo, gerenta de Acción Federal del Incaa, cumplieron una visita de cortesía al gobernador Luis Beder Herrera en Casa de Gobierno. "Inaugurar una sala lleva bastantes trámites -contó Mazure- porque estos ámbitos son privados o de las gobernaciones o los municipios y deben estar en condiciones legales, porque el exhibidor cobra su parte como cualquier exhibidor comercial".
Añadió que la batalla burocrática abarca todo el país y que por resoluciones de trámites se pudo abrir pantallas para el cine nacional en Oberá, Tapalqué y Rawson, en las últimas semanas, a las que se sumarán varias más en la actual temporada.
Según la titular del Incaa, "hay una voluntad política desde el Poder Ejecutivo Nacional, un apoyo enorme a esta iniciativa cultural, e incluso estamos tramitando una ampliación de nuestro presupuesto para poder ayudar a las salas en el tema edilicio".
"Darnos una mano con esto es una decisión de Presidencia, ya que es un punto que desde el presupuesto del Incaa no podemos solventar; aunque hemos encontrado en nuestra propia gente la capacidad de articular políticas", destacó la funcionaria.
Destacó que cuando el Incaa llega a cada ciudad con sus representantes, su equipo técnico y la prensa, los gastos de viáticos y alojamiento son solventados por los propios municipios y no por la repartición que conduce, cuyo presupuesto no lo permitiría.
"El mantenimiento y la renovación edilicia es un trabajo en conjunto, pero nosotros los impulsamos y ayudamos en cuanto a articulación, pero no con dinero y sin embargo las cosas van saliendo y funcionan", estimó.
Añadió que el proyector instalado en Espacio 73 fue usado en otro Espacio Incaa, y que la institución se ocupó de su puesta a nuevo y el entrenamiento en su manejo del personal local, hasta ahora a cargo de un cañón electrónico que utilizaba el formato DVD. Para Mazure, "cada sala es un mundo, las condiciones técnicas y edilicias en que se encuentran son distintas, y entre todos los pedidos que surgen en el país nuestro equipo técnico va observando las condiciones".
A los títulos argentinos que se ofrecen en esos Espacios se sumarán en breve latinoamericanos y europeos, "porque hemos pedido una ayuda para las salas al programa Media, de la Unión Europea, a condición de que se pase un porcentaje de cine europeo".
"El tema es que tanto los europeos como nosotros tenemos el mismo problema, que es la invasiva presencia de Hollywood en la mayoría de las pantallas -apuntó-; entonces es muy bien vista esta iniciativa del Incaa en todas partes.
La titular del cine argentino señaló además que el Incaa está en busca de "sponsors" dentro del ramo del cine y aledaños "para que "sponsoreen" las salas y las hagan crecer; el tema del audiovisual presenta hoy muchas facetas y mucho interés para las empresas".
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